Este té chai latte hace años que se convirtió en una de mis bebidas preferidas, si os gustan las especias, os encantará.

Es un bebida que te arropa con esa combinación de especies tan especial, esos días que tenemos más tiempo para disfrutar de las pequeñas cosas. A mi me encanta preparármela un domingo por la tarde de invierno calentita o cuando hace más calor con un poco de hielo. Se puede disfrutar cualquier día del año.

Es super sencilla de preparar, incluso podéis prepararla con antelación y guardarla en la nevera para el día siguiente, calentarla o tomarla fría.

Ingredientes para dos personas:

200 ml. de agua

300 ml. de leche de almendras (para mi esta leche es perfecta para esta combinación de ingredientes, pero podéis poner la que más os guste).

Una rama de canela

Un rodajita de jengibre o un cucharadita de jengibre en polvo

Dos granos de cardamomo

Tres clavos

Un anis estrellado

Cinco granos de pimienta rosa (Opcional)

Dos bolsitas de Roobois ( o el Té que más os guste)

Endulzante a vuestro gusto, una cucharadita de cualquiera que os guste. Yo no suelo endulzarla, me gusta tal cual. A veces le añado también un trocito de vaina de vainilla.

Preparación:

Ponemos a hervir el agua con las especies y el jengibre tal cual, más o menos durante 3 o 4 minutos hasta que llegue a ebullición, cuando esté listo lo apartamos del fuego, añadimos las bolsitas del rooibos, tapamos y reservamos un poquito, a continuación lo colamos y añadimos la leche de almendras un poco caliente, lo espolvoreamos con un poco de canela. Y a disfrutarlo¡¡¡¡¡

También podemos mezclar las especias en un mortero y molerlas un poco para que liberen más su fragancia antes de ponerlas a hervir en el agua, ya depende más del tiempo que tengáis a la hora de preparar la receta.

Espero que guste tanto como a mí, es super sencilla y admite cualquier ingrediente o especia que os guste, podéis tomarla caliente o fría, con la leche y endulzante que más os guste.

Bon appetit¡¡¡¡¡¡